Os presentamos el viaje ideal a Bhutan, de 9 días de duración (más dos en Katmandú), suficientemente largo para ver lo más bonito de este bello país… y un poco más. Sin tener que ir con el cronómetro en marcha.
Druk-yul es como llaman a su país los habitantes de Bhutan, los Druk-pa, la tierra del dragón del trueno, el emblema que figura en su bandera. Para acceder al reino de Bhutan la mejor opción de vuelo es vía Katmandú, ya que podemos llegar a Paro en tan solo dos escalas, aunque hay que añadir una noche en la capital de Nepal y recomendamos también un día en Katmandú al regreso. Enlazar el vuelo internacional de regreso con el de la mañana de Bhutan a Nepal es viable, aunque las condiciones meteorológicas pueden afectar a estos últimos y complicarnos el regreso. Y una visita a Katmandú bien vale la pena. Asimismo puede completarse con más días en Nepal sin ningún problema, en un gran combinado Nepal y Bhutan. Tradicionalmente ha sido unos de los países más aislados del mundo, y no se abrió a el turismo hasta hace pocas décadas, en los 70, estando aun muchas zonas del país restringidas. Pero precisamente este hecho, que ha mantenido aisladas sus tradiciones y cultura de la influencia occidental, se ha convertido en el principal polo de atracción para los turistas. Y Bhutan ha sabido aprovecharlo con una buena organización turística y unas tasas no aptas para todos los bolsillos, de manera que es un destino relativamente caro y exclusivo, pero permite que su maltrecha balanza comercial empiece a recuperarse en un país donde el 80% de la población vive de la agricultura. Sus tradiciones y su cultura han pervivido bastante inmutables durante siglos, y en realidad muchas de ellas se encuentran reguladas por ley, desde la indumentaria en determinadas situaciones, hasta la forma de construir las casas. Con una población muy escasa de unos 700 mil habitantes, destaca por querer tomar su propio camino entre sus poderosos vecinos, India y China. Bhutan se hizo famoso por su FIB, Felicidad Interior Bruta, incluida en su constitución y proclamada en 1974 en el discurso de coronación de su cuarto rey. Para los gobernantes de Bhutan lo importante no es gobernar para producir más (PIB), sino para que los ciudadanos sean más felices. Es una democracia desde el año 2008, pero curiosamente lo es por empeño de su monarca y en contra de la voluntad del pueblo que no lo consideraba necesario. Bosques frondosos y altas cumbres del Himalaya al norte definen un paisaje majestuoso, casi no perturbado por las pocas carreteras existentes, gente amable y tranquila recibirán al viajero que emprende el camino por el llamado último Shangri-la de la tierra.
Salida en vuelo internacional a Katmandú, noche a Bordo.